La memoria me traiciona, pero diría que hace dos veranos apareció muerta una cigüeña en el nido de la torre de la iglesia de Alamillo. Parece ser que dichas aves no vuelven al nido si encuentran algún congénere muerto.
Estando así las cosas y habiendo tomado el nido unas dimensiones desproporcionadas se optó al cabo del tiempo de hacer una limpieza en la torre para subsanar estas dos cuestiones.
Ahora bien si queremos que las cigüeñas sigan anidando en la torre se les debe poner un ligero armazón para que ellas lo sigan construyendo.
No se lo que han puesto arriba, solo sabemos que este año por allí no ha pasado ave alguna.
Y me asalta la duda como mal pensado que quizá se haya hecho a propósito... Total las cigüeñas ya tienen el campo... No sé, no sé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario